jueves, 10 de julio de 2014

LA CORTEZA TERRESTRE



LA CORTEZA TERRESTRE
Si quitásemos el agua de la Tierra, ¿serían igual los fondos de los mares y océanos que la superficie de los continentes?
Pues resulta que no. Los fondos oceánicos son mucho más homogéneos, tanto en morfología como en materiales, que los continentes.
Podemos decir, por tanto, que hay dos tipos de Corteza claramente diferentes: la Corteza Oceánica y la Corteza Continental.
La Corteza Continental: Formada por rocas de todo tipo. En las zonas más profundas predominan las rocas metamórficas.
*Puede llegar a espesores de 70 km.
*En los continentes podemos encontrar rocas de ¡más de 3.500 millones de años de antigüedad! 
*La superficie es heterogénea: valles, montañas mesetas.
La  Corteza Oceánica: Formada por rocas volcánicas (basaltos) en superficie y plutónicas (gabros) en profundidad.
*Su espesor varía entre 5 y 10 km.
- No supera los 180 millones de años de antigüedad.
*La superficie es muy homogénea (llanura abisal). Alterada sólo por las grandes cordilleras oceánicas (dorsales centro oceánicas) y por las fosas marinas.

 El paso de un tipo de corteza al otro se realiza a través de la denominada Corteza de Transición, que se sitúa en el talud continental. Consiste en bloque de Corteza Continental entre los que se encuentran rocas volcánicas de la Corteza Oceánica.
            
TEORÍA DE LA TECTÓNICA DE PLACAS.
Es una teoría geológica que explica la forma en que está estructurada la litosfera (la porción externa más fría y rígida de la Tierra). La teoría da una explicación a las placas tectónicas que forman la superficie de la Tierra y a los desplazamientos que se observan entre ellas en su movimiento sobre el manto terrestre fluido, sus direcciones e interacciones.
Existen tres tipos de Movimientos de las placas:
1.- De Separación o zona de Abducción: Cuando las placas se alejan una de la otra se les llama divergentes. Esto sucede con las placas norteamericana y europea que se separan a una velocidad de 2,5 centímetros por año. Al separarse se produce un espacio que es rellenado con magma. Cuando éste se endurece se aleja del lugar donde surgió generando un nuevo hueco que es rellenado con nuevo magma. El proceso crea el sistema que da origen al fondo oceánico. En estas zonas no suelen ocurrir sismos de gran intensidad.
2.- De colisión o zona de subdicción: Cuando las placas son convergentes una se hunde bajo la otra. El caso más conocido es el de nuestro país que se ubica en la placa Sudamericana bajo la cual se hunde la placa de Nazca. Este fenómeno, también llamado subducción, afecta a las costas de Chile y Perú provocando gran número de sismos en la zona.
3.-  De desplazamientos laterales: Cuando las placas se desplazan paralelamente entre sí pero en sentidos opuestos, generando sismos. Esto ocurre en la Falla de San Andrés, en California, Estados Unidos, área de numerosos terremotos.  Todas estas zonas son áreas de intensas actividades volcánicas y sísmicas.
PROCESOS GEOLÓGICOS INTERNOS:
 El paisaje que observamos a nuestro alrededor se ha generado como resultado de la acción conjunta de los fenómenos geológicos internos y externos. Los fenómenos geológicos internos (terremotos, movimiento de placas tectónicas, vulcanismo...) son los creadores de relieve y se producen en el interior de la Tierra gracias a la energía interna del planeta.
Esos relieves creados (montañas, cordilleras...) son modelados por los fenómenos geológicos externos (erosión, transporte, sedimentación...), que se producen gracias a la energía del Sol y la gravedad.
Los procesos geológicos internos se producen en diferente escala de tiempo y de intensidad. En general suelen ser lentos e imperceptibles (movimiento de placas...) pero también los hay instantáneos y apreciables a simple vista (erupción volcánica o terremoto)
FORMACIÓN DE LAS CORDILLERAS O MONTAÑAS
La orogénesis, o creación de montañas, tiende a ser un proceso localizado que distorsiona los estratos preexistentes. Las cordilleras se forman en zonas especiales de la corteza, llamadas geosinclinales: Cuencas marinas donde se recogen gran cantidad de sedimentos que proceden de la destrucción del continente. En ésta zona de compresión de la corteza se originan las grandes fuerzas necesarias para plegar los materiales. Las montañas se generan en los bordes destructivos de las placas de la litosfera, lo que explica la presencia de pliegues, fallas inversas, volcanes y terremotos. La actividad será mayor cuando más joven sea la cordillera.
VOLCANES
Es una fisura en la corteza terrestre sobre la que se acumula un cono de materia volcánica. Los volcanes se producen por la efusión de lava desde las profundidades de la Tierra. La mayoría de los volcanes son estructuras compuestas, formadas en parte por corrientes de lava y materia fragmentada.
Muchos volcanes nacen bajo el agua, en el fondo marino. El Etna y el Vesubio empezaron siendo volcanes submarinos, como los conos amplios de las islas Hawai y de otras muchas islas volcánicas del océano Pacífico.
Las erupciones de los volcanes pueden ser de tipo:
Hawaiano: hay muy poca explosiones y proyecciones, da lugar sobre todo, a coladas de lava fluida. Forma grandes volcanes de conos muy planos pero cuyo diámetro puede alcanzar varias decenas de km.
Peleano: recibe su nombre de las observaciones realizadas en la montaña Pelée en la isla de la Martinica. Su principal característica es la emisión de nubes ardientes, suelen producirse también lavas muy viscosas que fluyen con dificultad y que puede alzarse en forma de agujas en el seno del cráter.
Estromboliano: En el archipiélago de las islas Lipari (Italia) está el volcán Strómboli que se caracteriza por erupciones explosivas con gases y cenizas; el penacho volcánico, en forma de sombrilla, puede subir muy arriba antes de provocar la lluvia de cenizas.
Vulcaniano: Vulcano, vólcan situado también en las islas Lipari, se caracteriza por la eyección violenta de lavas viscosas, gases y cenizas que forman bombas volcánicas. El nombre de la isla y de allí de los volcanes deriva de Vulcano, el dios del fuego de la mitología romana.
LOS TERREMOTOS
Son sacudidas bruscas y breves de la corteza terrestre. Éstos fenómenos se producen sobre todo en los bordes de las placas litosféricas, alcanzando mucha más violencia en las zonas de subducción donde las fricciones son muy intensas al tratarse de la introducción forzada de una placa litosféricas bajo otra. Otros terremotos se producen en el interior de las placas litosféricas como es el caso de un continente sometido a una fuerte tensión debido a la formación de un orógeno en el borde de la placa de la que forma la parte. También pueden provocarse por erupciones volcánicas o por la formación de fallas.
FALLAS
Son Líneas de fractura a lo largo de las cuales una sección de la corteza terrestre se ha desplazado con respecto a otra. Su aparición está asociada con los bordes entre placas que se deslizan unas sobre otras y con lugares donde los continentes se separan.
El movimiento responsable de la dislocación puede tener dirección vertical, horizontal o una combinación de ambas. Cuando la actividad en una falla es repentina y abrupta, se puede producir un fuerte terremoto e incluso una ruptura de la superficie formando una forma topográfica llamada escarpe de falla.
PROCESOS Y AGENTES  EXTERNOS O EXÓGENOS:
La tierra está sometida a una serie de procesos que tienden a allanar relieves, a destruir rocas creando cosas nuevas, etc. Todos estos agentes actúan gracias a dos tipos fundamentales de energía: La del Sol y la atracción de la gravedad. Los ríos, las aguas subterráneas, los glaciares, el viento y los movimientos de las masas de agua (mareas, olas y corrientes) son agentes geomorfológicos primarios.
METEORIZACIÓN O EROSIÓN: En la que los agentes actúan sobre la roca disgregándola y descomponiéndola. Existen dos tipo de meteorización que pueden actuar simultáneamente o por separado: Mecánica (separación física de fragmentos de roca, puede realizarse por empuje del agente es sí por la acción de otros fragmentos de roca arrasados) que es muy frecuente en regiones con climas extremados: desiertos, montañas, etc. Química (alteración de la composición de las rocas por diversos productos que el agente transporta), puede ser hidratación, hidrólisis, oxidación y carbonación.
TRANSPORTE DE LOS MATERIALES: Producidos en la erosión, bien disueltos en agua o bien suspendidos y arrastrados por el viento.
SEDIMENTACIÓN DE MATERIALES. La es la acumulación de los materiales transportados en el mar, lago, río o en llanuras, pie de montes y valles; los deltas, playas y dunas resultan de este proceso. Más especificadamente: Los ríos como agentes hidrológicos modifican el relieve con la sedimentación formando llanuras de inundación y deltas y con la erosión forman terrazas; el mar con la sedimentación forma: playas, lagunas, tómbolos (estrechas lenguas de tierra que unen una isla a la tierra firme), y con la erosión: acantilados, plataforma de abrasión (espacio llano situado al frente del acantilado por erosión del mismo), cuevas, arcos, agujas; y el hielo de los glaciares forma por sedimentación las morrenas (depósitos de materiales arrasados por el glacial) y por erosión circos (depresiones semi-circulares de paredes escarpadas), valles, estrías (rayaduras en las rocas), aristas (cresta agudas que separan dos circos vecinos) y picos piramidales.
AGENTES  EXTERNOS
EL VIENTO: Es responsable de la erosión eólica, proceso extremadamente lento, que se evidencia más en los climas áridos y semi-áridos, donde hay escasa vegetación: la superficie no está protegida, por eso el viento toma los sedimentos secos y sueltos y los transporta en función de su velocidad, hasta un lugar donde esta disminuye con las consecuente acumulación y formación de dunas.
Deflación derivado del latín “soplar”. Tiene lugar cuando las partículas sueltas que se hallan sobre la superficie del suelo son barridas, arrastradas o levantadas por el aire. Este proceso actúa donde la superficie del terreno está completamente seca y recubierta de pequeños granos de arena sueltos procedentes de la meteorización de la roca o previamente depositadas por el agua en movimiento, el hielo o las olas. Por lo tanto, los cursos de los ríos secos, las playas y las áreas recientemente cubiertas por depósitos glaciares son muy susceptibles a la deflación; este proceso eólico de deflación es selectivo.
Abrasión eólica o Corrosión. Producida por el golpe directo y continuo de partículas en saltación. Los suelos arcillosos son los más resistentes a esta forma de erosión eólica y los francos a franco-arenosos los más susceptibles.
Las Dunas: Son los rasgos más comunes de la sedimentación eólica y pueden adoptar diferentes formas según su orientación con respecto al viento: la forma y la orientación sirven para clasificar las dunas que son transversales ( con crestas o lomas onduladas orientadas perpendicularmente respecto a la dirección del viento, tipo una parte de los Médanos de Ica, longitudinales (lomas estrechas y alargadas en la dirección del viento, separadas por depresiones o corredores, presentes también en los Médanos); y las barcanas (en forma de media luna con las puntas orientadas en la dirección del viento, son dunas aisladas y estas también se encuentran en los Médanos).

Depósitos de loess: Lo forman depósitos de limo originados por la deposición de partículas con tamaños que van desde los 10 a los 50 micrómetros y que son transportadas por las tormentas de polvo a lo largo de miles de años. Es de color amarillento y carece de estratificación. Está formado principalmente por silicatos (cuarzo, feldespato, etc.), carbonato de calcio (procedente de roca caliza, dolomía, etc.), finísimos detritos orgánicos y minerales del grupo de las arcillas. Constituyen un suelo de labor muy fértil y profunda.
La lluvia o Erosión fluvial. Es la acción de desgaste ocasionado por las aguas de torrentes, aguas salvajes, y ríos. Las aguas de torrente se forman después de las fuertes lluvias, cuando las aguas impetuosas escurren en un cauce irregular; su acción es destructiva, al igual que la de las aguas salvajes, son el resultado de los deshielos o bien de las intensas lluvias, y dan lugar a escurrimientos violentos sin cause definido y a destrucción de todo lo que encuentra en su paso, los ríos se caracterizan por erosionar verticalmente el terreno; prueba de ello lo constituye los valles fluviales y los cañones.